Al dirigirse al pueblo de Pakdasht, el mandatario persa señaló que a pesar de que el enemigo quería que la venta del petróleo iraní redujera a cero, que el país persa se excluyera de la economía de la región y que la rueda de producción en el país se detuviera, pero la participación de la República Islámica en el comercio regional aumentó en aproximadamente un 50%, y las ruedas de la producción giran gracias a los esfuerzos de los jóvenes, razón por la cual, el enemigo confesó oficialmente que su política de máxima presión ha derrotado humillantemente .
El Presidente afirmó que cuando el enemigo vio que a pesar de todos sus esfuerzos, Irán avanza, pensó en crear caos en el país, y aclaró: “Digo con confianza que así como fracasó la cruel política de sanciones del enemigo, el complot para desestabilizar el país también fracasó nuevamente".
Raisi señaló la membrecía de la República Islámica en la Organización para la Cooperación de Shanghái, asi como el incremento de su cooperación regional, a pesar de que el enemigo afirmaba que si Irán no aceptaba las condiciones, no podría mantener relaciones con los países de la región y del mundo.
“El enemigo pensó que podía frenar el progreso del país con motines y caos, pero eso fue una ilusión, porque vieron que el gobierno está con y al lado del pueblo”, resaltó el presidente.
Asimismo, se refirió a la imposición de la guerra de 8 años a la nación iraní y al martirio de más de 17.000 iraníes por parte de los hipócritas que fueron apoyados por los países occidentales, concluyendo: "El enemigo fracasó en todas estas conspiraciones, pero no ha escarmentado".
Los disturbios estallaron en Irán a mediados de septiembre tras la muerte de la joven iraní Mahsa Amini, quien se desmayó en una comisaría de Teherán y fue declarado muerto tres días después en un hospital.
El informe oficial de la Organización de Medicina Forense de Irán indicó el pasado 7 de octubre que la muerte de Amini de 22 años no fue causada por golpes en la cabeza o en órganos y elementos vitales.
Cabe recordar que aunque el ayatolá Raisi se encontraba en Uzbekistán para participar en la 22ª cumbre de la Organización para la Cooperación de Shanghái (OCS), tan pronto como se enteró de la muerte de Mahsa, llamó al padre de la joven y lo consoló y prometió una investigación inmediata para esclarecer el asunto, lo cual según el padre de la fallecida le dio fuerza a la familiar para seguir el incidente a través de la Ley.