El presidente de Colombia, Gustavo Petro, inauguró el martes en Bogotá, la Conferencia Internacional sobre el proceso político en Venezuela.
En referencia a los bloqueos impuestos por Estados Unidos contra varios países de la región, Petro enfatizó que la región “no puede ser un espacio de sanciones”.
“América no puede ser un espacio de sanciones, América tiene que ser un espacio de libertades y América tiene que ser un espacio de democracia”, precisó el mandatario colombiano.
En este sentido, recomendó que Venezuela reingrese al Sistema Interamericano de Derechos Humanos y, al mismo tiempo, pidió que se construya un cronograma para levantar las sanciones económicas contra Caracas.
El canciller de Colombia, Álvaro Leyva, por medio del comunicado final de la Conferencia, instó al levantamiento de las medidas coercitivas contra el país suramericano.
En la víspera, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, subrayó que "no aceptamos menos de esa conferencia de Bogotá, el levantamiento de todas las sanciones para que Venezuela tenga la libertad comercial, financiera, económica, para recuperar todo lo que hay que recuperar en lo económico, productivo y social".
La conferencia tiene el propósito de propiciar un espacio que permita la reanudación del diálogo entre el Gobierno de Venezuela y sectores de la oposición.
Entre 20 países invitados a la reunión, participaron por Latinoamérica representantes de Argentina, Barbados, Bolivia, Brasil, Chile, Honduras, México y San Vicente y las Granadinas, además de Turquía y Sudáfrica.
Asimismo, están invitados representantes de Alemania, España, Francia, Italia, Noruega, Portugal y el Reino Unido y el Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Unión Europea.