En declaraciones efectuadas este lunes, Seyed Ali Kazemi puso de relieve que el Gobierno de la República Islámica de Irán está haciendo todo lo posible para acoger y asentar a los desplazados afganos.
“Se espera que en línea con sus responsabilidades y deberes humanitarios que provienen de los documentos de derechos humanos, las organizaciones internacionales y otros países también brinden más asistencia en este campo”, concluyó el viceministro.
La emigración de los refugiados afganos a diversos países, especialmente a Irán sigue continuando hasta hoy, especialmente después de que en 2001 EEUU y sus aliados de la OTAN hayan desplegado en el país centroasiático con el pretexto de restablecer la seguridad en él y derrocar el entonces gobierno de los talibanes.
La República Islámica de Irán ha abierto sus brazos a millones de inmigrantes de diferentes países, cuando en las últimas cuatro décadas, se encuentra bajo estrictas sanciones como resultado del silencio de las organizaciones internacionales y de derechos humanos del mundo.
La presión de los embargos ha tenido un impacto negativo no solo en la vida de los iraníes, sino también en la de los solicitantes de asilo.