Durante la conversación telefónica sostenida este jueves, el jefe de la Diplomacia persa elogió los esfuerzos Guterres para poner fin a la guerra y el genocidio de Israel en Gaza, asegurando que la República Islámica de Irán continuará sus esfuerzos para ayudar a establecer la estabilidad y seguridad duraderas en la región y poner fin a los crímenes de guerra del régimen sionista en el enclave costero palestino.
Amir Abdolahian apoyó la respuesta del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) al plan político para frenar la guerra, señalando: "Como continuación de la 'política de terror y genocidio', el régimen sionista está intentando provocar otro desastre humano en la región cerrando los cruces fronterizos de Rafah y Karem Abu Salim y hacer infructuosos los esfuerzos internacionales para detener la guerra".
"Ahora es la Casa Blanca la que debe elegir entre mostrar la voluntad de presionar al régimen israelí para que detenga la guerra o arrastrar a la región a un nivel nuevo y diferente de crisis y tensión", señaló el canciller iraní, advirtiendo que si Estados Unidos en vez de ejercer presión sobre Netanyahu para aceptar un alto el fuego, muestra indulgencia hacia el régimen israelí al cometer nuevos crímenes en Rafah, las consecuencias serán graves para los partidarios de la guerra.
Por su parte, el secretario General de la ONU elogió las sabias medidas y posiciones de Irán para establecer la paz y la seguridad en la región, reiterando que la ONU siempre ha mantenido una postura firme sobre la importancia de establecer un alto el fuego y poner fin a la guerra en Gaza lo antes posible.
Antonio Guterres añadió que la ONU seguirá ejerciendo presión sobre Israel y mantendrá consultas constantes con EEUU y otros países influyentes para establecer un alto el fuego inmediato y poner fin a la guerra en Gaza y la región, así como para abrir Rafah y otros pasos fronterizos lo antes posible.