Por medio de un comunicado, el Gobierno de Brasil condenó el ciberataque del régimen sionista a El Líbano, advirtiendo que tales acciones conducen a una notable escalada de tensiones en la región y exacerban el riesgo de que el conflicto se extienda.
“Estas acciones también demuestran que, lamentablemente, los múltiples llamamientos de la comunidad internacional para que los actores de Oriente Medio ejerzan la máxima moderación han sido ineficaces”, agregó el Gobierno brasileño, reiterando la necesidad de pleno respeto a la soberanía e integridad territorial de todos los estados.
A su vez, el Gobierno de Venezuela, publicó un comunicado, en el que se lee: “La República Bolivariana de Venezuela condena enérgicamente el ciberataque perpetrado por Israel contra los habitantes del sur del Líbano, de Beirut y sus alrededores, este 17 de septiembre de 2024, que dejó al menos 12 personas fallecidas y 2800 heridos.
Este tipo de prácticas generadora de violencias, víctimas mortales y destrucción, ocasionan, además, pánico y zozobra en la población civil indefensa. Este ataque articulado a través de un sofisticado método de terror e intimidación a la población, se suma a las aborrecibles técnicas utilizadas por gobiernos hostiles en la peligrosa y creciente escalada de tensión política y militar en el Oriente Próximo.
Venezuela, en concordancia con su posición histórica de promotora de la paz y de la defensa del derecho a la vida, advierte, que el silencio de la comunidad internacional frente a la perversa y sistemática violación de los principios contemplados en el Derecho Internacional humanitario y la inobservancia de las disposiciones de todas las leyes y convenios internacionales, por parte de regímenes que estimulan el terrorismo, solo alimenta las pretensiones de quienes desean desencadenar una peligrosa escalada de violencia de consecuencias inimaginables en la región”.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Cuba, publicó un mensaje y condenó el ciberataque del régimen sionista contra El Líbano “que ha causado la muerte de casi 10 personas y dejado otras 2.800 personas herida”s.
“Estos hechos constituyen una grave escalada en el conflicto en Medio Oriente con graves e impredecibles consecuencias para la región”, advirtió.