El Ministro de Economía y Finanzas de Irán, Abdolnaser Hemati subrayó que, el cambio de paradigma y su efecto en la relación entre la política industrial y la estrategia de promoción de inversiones no solo determinará el futuro de la economía global, sino que también moldeará el destino de la cooperación internacional y la calidad de vida de las personas en todo el mundo.
Al señalar que la economía global ha estado influenciada por múltiples problemas en los últimos años, aseveró que las crisis climáticas, los cambios geopolíticos, las fluctuaciones severas en el ámbito energético y las desigualdades derivadas de la aparición de tecnologías novedosas como la inteligencia artificial, blockchain y la revolución digital son solo parte de estas transformaciones.
“El crecimiento de la economía global, que según datos del Banco Mundial en la última década ha sido generalmente inferior al 3.5% anual, ahora se enfrenta a incertidumbres crecientes”, añadió.
Hemati también agregó que, el crecimiento desigual entre economías emergentes y avanzadas, el aumento de tensiones comerciales y la desaceleración de las cadenas de suministro globales se han convertido en cuestiones fundamentales para todos los gobiernos. Sin embargo, entre estos desafíos también han surgido oportunidades sin precedentes.
En otra parte de sus declaraciones, el Ministro iraní de Economía enfatizó que: “Las sanciones económicas no solo son perjudiciales para Irán, sino que sus daños políticos y económicos se han extendido a toda la economía de la región y del mundo.”
Asimismo, destacó que la economía iraní, al contar con recursos naturales, minerales y energéticos ricos, una población joven y educada, una posición geopolítica privilegiada y una amplia red de infraestructuras económicas, tiene un potencial extraordinario para enfrentar estos desafíos y aprovechar estas oportunidades.