Durante una ceremonia conmemorativa del 72º aniversario del Día de la Nakba (catástrofe) y preparatoria del Día Mundial de Al-Quds, el embajador iraní insistió que el propósito de esa reivindicación es llamar la atención de los musulmanes e instarles a forjar una mayor conexión con la primera Qibla, alejándola de subastas internacionales e impidiendo que se convierta en un bocado para los sionistas y sus patrocinadores.
"Desde el principio, la República Islámica de Irán fue atacada y sitiada económicamente por su apoyo a los legítimos derechos del pueblo palestino", recordó Torkabadi.
Por su parte, el presidente del Alto Comité de Apoyo a la Intifada y la Resistencia contra los sionistas, Mohammad Mostafá Mirou, destacó la necesidad de trabajar por la liberación de todos los territorios palestinos ocupados por Israel, instando a unirse al movimiento contra los planes sionistas-estadounidenses en el región, y a trabajar por mantener vivo el Día de Al-Quds y la cuestión palestina.
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