A principios de este invierno, el gobierno iraní autorizó las negociaciones para impulsar el libre comercio con Eurasia; y si esas conversaciones finalmente fructifican, las transacciones comerciales comenzarán a mediados de otoño del próximo año iraní, eliminando los obstáculos relacionados con los aranceles aduaneros.
Ahora, antes de reiniciar las conversaciones sobre el libre comercio con Eurasia, que previsiblemente se celebrarán en menos de un mes, es muy importante tratar de eliminar los obstáculos que impiden el desarrollo económico entre ambas partes.
La cooperación de Irán con ese gran bloque económico, estimada en más de 800 mil millones de $, presagia impulsar nuestro comercio con varios países, especialmente con nuestros vecinos, justo cuando los enemigos están tratando de segregar a Irán y romper nuestros lazos comerciales con el resto del mundo.
La trascendencia económica del bloque es tan significativa, que tras su creación distintos países expresaron su interés en formar parte de él. El volumen comercial de Eurasia a nivel internacional oscila en la actualidad en los 850 mil millones de $. Solo las importaciones alcanzan los 331 mil millones de $.
La participación actual de Irán sobre el total de ese volumen es de alrededor 2,5 mil millones de $. Nuestro país importa unos 1,6 mil millones desde Eurasia y exporta unos 823 millones.
El 80% de las exportaciones de Eurasia a Irán lo componen diversos productos agrícolas, especialmente semillas comestibles; y el 68% de las exportaciones iraníes a Eurasia lo componen principalmente productos agrícolas, en especial frutas y nueces.
Indudablemente, el desarrollo de la cooperación entre Irán y la Unión Económica Euroasiática supondrá un salto importante en las exportaciones petroleras y no petroleras de nuestro país y, en última instancia, puede facilitar la entrada de divisas y desempeñar un papel destacado en la superación de las actuales dificultades económicas.
Otra de las ventajas de esa cooperación es la consecución de privilegios aduaneros especiales, los cuales permitirán aumentar las exportaciones a los cinco países miembros de la unión.
Por último, los expertos consideran que el siglo XXI será el siglo de Asia y que el centro de gravedad de la riqueza mundial se está desplazando de Wall Street y Silicon Valley a China y la India. Y Eurasia también podrá beneficiarse por su proximidad a estos dos grandes países.
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