Rohani efectuó estas declaraciones durante la sesión del gabinete al referirse al sabotaje del pasado domingo contra la central de enriquecimiento de Natanz, en el centro de Irán.
“Cortamos la mano cuando se comete un delito”, señaló metafóricamente, añadiendo: “Cortamos una mano con las (centrifugadoras) IR6 y la otra con el 60% de enriquecimiento”.
El gobierno está a la espera del informe oficial definitivo de los responsables de seguridad, aunque aparentemente, todos los indicios apuntan a que el crimen fue cometido por el régimen sionista.
La primera respuesta iraní consistirá en reemplazar las centrifugadoras IR1 por las IR6, para que los enemigos sepan que no pueden impedir que sigamos desarrollando esta tecnología tras ocasionar un problema en las centrifugadoras IR1, aseguró.
“Sabemos lo que están haciendo. Quieren vaciar nuestras manos ante las negociaciones, aunque acudimos a ellas con las manos llenas”, añadió el mandatario iraní.
“Responderemos a sus complots, pero al mismo tiempo declaramos de nuevo que nuestras actividades son definitivamente pacíficas y sometidas a la supervisión de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA)”.
El presidente reiteró que Irán retomará sus compromisos estipulados en el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA) el mismo día en que los otros firmantes del acuerdo cumplan sus obligaciones.
Sin embargo, Irán verificará previamente si los miembros del JCPOA cumplen realmente sus compromisos, lo cual no llevará mucho tiempo, pues sabemos cómo hacerlo, concluyó.
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