Las estadísticas relacionadas con la producción de las centrales térmicas del país ponen de manifiesto que durante el año pasado, con la inclusión de la unidad de vapor a las centrales de Parand, Assaluye, Urmia, Ferdowsi, Shirvan, Sabalan y Caspio, se registró un notable incremento en la producción de las centrales de ciclo combinado, unas plantas de energía respetuosas con el medio ambiente.
La conversión de las centrales de gas a ciclo combinado es una de las formas más eficientes para mejorar el rendimiento de las centrales térmicas del país, la cual contribuye significativamente no solo a mejorar el rendimiento de la industria eléctrica iraní, sino también a la protección del medio ambiente y al ahorro del consumo de combustibles fósiles.
A lo largo del año pasado, alrededor del 92% de la demanda eléctrica del país se produjo desde las centrales térmicas, lo cual supone un incremento del 9% respecto al 1398.
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