El texto completo de su carta es el siguiente:
Excelencia:
Cuando se cumple el segundo aniversario del horrible asesinato del mártir general de división Qasem Soleimani, el comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolucionaria Islámica, una rama oficial de las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán, y sus compañeros, el 3 de enero 2020 en el Aeropuerto Internacional de Bagdad, por orden directa del entonces presidente de EEUU, me gustaría llamar su atención sobre la reciente información respecto a la participación del régimen israelí en este atroz acto terrorista.
En una entrevista realizada últimamente, el exjefe de inteligencia militar del régimen israelí reconoció la participación de ese régimen en el asesinato premeditado del mártir Soleimani, afirmando que la "inteligencia de Israel jugó un papel", describiéndolo como uno de los dos asesinatos más significativos e importantes durante su mandato.
Tal como he subrayado en numerosas ocasiones, incluidas mis cartas del 3 de enero de 2020 (S/2020/13), 7 de enero de 2020 (S/2020/16) y 29 de enero de 2020 (S/2020/81) dirigidas al Secretario General y al presidente del Consejo de Seguridad, este acto delictivo internacionalmente ilícito supuso una grave violación de las obligaciones de EEUU en virtud del derecho internacional, por lo que debe conllevar su imputación internacional.
Este acto delictivo conlleva también la responsabilidad penal de todos aquellos que hubieran ayudado, incitado o asistido y apoyado, por cualquier medio, directa o indirectamente, en la planificación o realización de este acto terrorista, y un claro ejemplo es el papel solidario y la participación del régimen israelí en el mismo.
El mártir Soleimani desempeñó un importante papel en la lucha contra el terrorismo internacional y, consecuentemente, recibió legítimamente el título de Héroe de la lucha contra el terrorismo y General de la paz, por lo que su cobarde asesinato fue un gran regalo y un gran servicio al Daesh y otros grupos terroristas de la región, los cuales también acogieron con satisfacción su asesinato, calificándolo como “un acto de intervención divina que los benefició”.
Dadas las terribles implicaciones de este acto terrorista para la paz y la seguridad internacionales, el Consejo de Seguridad debe estar a la altura de sus responsabilidades según se estipula en su Carta, y hacer que EEUU y el régimen israelí rindan cuentas por la planificación, el apoyo y la comisión de ese atentado terrorista.
De acuerdo con nuestros derechos y obligaciones en virtud del derecho internacional, las Fuerzas Armadas iraníes están decididas a proseguir enérgicamente el camino del Mártir Soleimani para ayudar activamente a las naciones y gobiernos regionales, cuando así lo soliciten, a combatir contra los grupos terroristas respaldados por extranjeros en la región hasta que sean desarraigados por completo.
9408**1233
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