Según las fuentes yemeníes, los aviones de reconocimiento de la coalición saudí volaron 27 veces en el espacio aéreo de las provincias de Marib, Hajjah, Saada y Lahj, y los helicópteros de la coalición bombardearon 16 veces los hogares de los ciudadanos y las posiciones del Ejército yemení en las provincias de Marib, Ad Dali y Lahij.
Estos ataques se produjeron después de que el enviado especial de la ONU para Yemen, el sueco Hans Grundberg, anunció el alto el fuego y dijo que la tregua de dos meses entró en vigor el sábado 2 de abril y detendrá todas las operaciones militares ofensivas en aire, tierra y mar.
Con el objetivo de aplastar el movimiento popular yemení Ansarolá y restaurar en el poder al expresidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, Arabia Saudí lanzó la devastadora guerra contra Yemen en marzo de 2015, la cual no ha alcanzado todos sus objetivos, a pesar de la muerte de cientos de miles de yemeníes y de convertir a todo el país en el escenario de la peor crisis humanitaria del mundo.
Según el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, entre las víctimas de esa devastadora guerra se encuentran al menos 10.000 niños.
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