Agradeciendo al pueblo de Irán por no sumarse a las bien organizadas conspiraciones de los hipócritas y enemigos de la Revolución destinadas a atentar contra los pilares de la seguridad del país, en especial las fuerzas que mantienen el orden, la seguridad y la paz en la sociedad, el CGRI escribió: “El agradecido pueblo del Irán islámico nunca olvidará los esfuerzos de los guardias de seguridad y su gloriosa presencia e intervención en varios escenarios y frentes y su dedicado y orgulloso papel en el mantenimiento y establecimiento de la seguridad en las fronteras y dentro de la sociedad. No olvidamos su lucha decisiva contra los disruptores, los quebrantadores de normas, los alborotadores y los alborotadores que intentaron quebrantar el orden público y la calma colectiva. Nuestro pueblo permanece siempre agradecido a sus verdaderos servidores”.
En otra parte de esta declaración, señalando la necesidad de inteligencia y vigilancia contra los intentos maliciosos y enemigos de atacar los sentimientos puros de los jóvenes apasionados y abusar de ellos mediante el uso de la guerra psicológica y mediática, se ha enfatizado: “Sin duda, la joven generación revolucionaria de nuestro país en constante surgimiento y nuestros estudiantes perspicaces e ilustrados, como futuros constructores de la patria, manteniéndose siempre fieles a los principales objetivos e ideales de la Revolución y en el brillante y prometedor camino trazado, sabrá desbaratar el plan diabólico del enemigo. Para ello, están más decididos que nunca y para ello tendrán siempre presentes sus grandes responsabilidades para el continuo progreso y grandeza del país”.
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