Según IRNA, citando a "Daily Mail", 2.200 policías fueron desplegadas en París y otras ciudades del país, donde usaron porras y cañones de agua para reprimir los disturbios.
Durante los enfrentamientos en Francia, un adolescente de 14 años resultó muerto en la ciudad de Montpellier; Esto ocurrió cuando un conductor hizo una maniobra brusca en marcha atrás con su coche después de que le hubieran arrancado una bandera francesa y arrolló a la víctima. El adolescente fue trasladado inmediatamente al hospital, pero perdió la vida finalmente.
Miles de personas se concentraron también en la avenida de los Campos Elíseos, lo que llevó a fuertes enfrentamientos con la Policía. Los fanáticos lanzaron fuegos artificiales contra los agentes, que emplearon gases lacrimógenos para dispersar a la multitud.
Según las fuentes franceses, en el conflicto entre los aficionados de los dos equipos de fútbol también se escucharon consignas racistas e insultantes de que los franceses exigían la vuelta de los marroquíes a su propio país.
En otros países europeos, incluido Bélgica, también estallaron enfrentamientos entre los hinchas de ambas selecciones de fútbol; Mientras tanto la policía dispersó a los participantes utilizando gases lacrimógenos.
Históricamente, las relaciones entre Francia y Marruecos han estado plagadas de problemas como el imperialismo y el uso de trabajadores inmigrantes del norte de África por parte de los franceses, creando una relación inestable y, en algunos casos, agresiva.
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