El acuerdo está en línea con un esfuerzo por perseguir los intereses a largo plazo de China e Irán y consolidar su relación tradicional.
La visita del ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Hosein Amir Abdolahian, a China en enero se consideró un paso práctico para dar seguimiento a la implementación del programa de cooperación de 25 años entre los dos países.
La administración del presidente, Seyed Ebrahim Raisi, ha otorgado importancia a mejorar los lazos con el Este en un momento en que Teherán enfrenta una falta de voluntad en Occidente para expandir las relaciones con Irán, ya que muchas naciones occidentales han dudado en cumplir con sus compromisos con respecto a Irán.
Menos de un año después de la visita del jefe de la Diplomacia iraní a Pequín, se finalizó un programa de 16 pasos en presencia del primer vicepresidente de Irán, Mohamad Mojber, y el viceprimer ministro de la República Popular China, Hu Chunhua, en Teherán hace unos días.
Los logros de la delegación china de 70 miembros en Teherán confirman que los lazos entre Irán y China son muy fuertes y en un nivel que está por encima de las relaciones normales entre las administraciones actuales en los dos países.
China es el mayor socio comercial de Irán. Según el acuerdo de asociación de 25 años entre los dos países, China podrá garantizar las compras de energía de Irán durante los próximos 25 años, lo que le permitirá a Irán desarrollar su infraestructura y continuar con sus planes de crecimiento económico después de dos décadas de presión económica por parte de las potencias occidentales.
Se espera que el programa de cooperación ayude a Irán a desarrollar su infraestructura de transporte y su sector manufacturero y para impulsar la transferencia de tecnología y facilitar las transacciones financieras.
En la visita de dos días a Teherán, la delegación china y la parte iraní sostuvieron conversaciones sobre una mayor cooperación en las áreas de energía, inversión, asuntos monetarios, banca, tránsito e infraestructura.
Durante las negociaciones con la delegación china, la parte iraní intentó continuar con la implementación de proyectos conjuntos y acelerar el proceso de transferencia de tecnología entre los dos países, al tiempo que destacó la necesidad de utilizar la mano de obra iraní en proyectos conjuntos.
El acuerdo de asociación brindará a las empresas iraníes una buena oportunidad para acceder a un mercado chino de más de mil millones de personas. Esto puede allanar el camino para mejorar la calidad de los productos fabricados en Irán para que puedan exportarse a China.
Como parte del acuerdo, China se comprometió a invertir en empresas conjuntas de tránsito con Irán por un valor aproximado de 60 millones de dólares. Eso ocurre cuando Teherán ha estado negociando con Pequín para aumentar la cantidad de esa inversión.
Parece que el acuerdo de 16 artículos finalizado entre Irán y China a principios de esta semana ofrece una perspectiva prometedora para la protección de los intereses mutuos de los dos países y allana el camino para nuevas negociaciones en el futuro que podrían mejorar los lazos económicos y comerciales bilaterales.
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