En declaraciones efectuadas en la reunión del Consejo de Seguridad sobre la implementación de la Resolución 2231 (2015), el diplomático ruso criticó que la retirada unilateral de EEUU del JCPOA y sus sanciones unilaterales contra Irán son las causas fundamentales de la actual crisis.
Sin embargo, denunció Nebenzya que el informe del facilitador de la implementación de la mencionada Resolución intenta mostrar que las medidas adoptadas por la República Islámica son similares a las de los Estados Unidos, e incluso, que Teherán es responsable de la crisis actual en la implementación del JCPOA.
El alto diplomático ruso también criticó que la retirada de EEUU del JCPOA ha sido ignorada en los informes presentadas en la sesión del Consejo de Seguridad, incluido en el de Secretario General de las Naciones Unidas.
Nebenzya insistió que las ilegales, unilaterales y discriminatorias sanciones de EEUU contra Irán deben ser eliminadas total y permanentemente.
Segun el diplomático, Rusia cree que el pacto nuclear iraní firmado en 2015 debe ser completamente implementado a la mayor brevedad posible.
En otra parte de sus declaraciones, el enviado ruso calificó las acusaciones de entregas de aviones no tripulados iraníes a su país para su uso en la guerra ucraniana como infundadas e inventadas, concluyendo que Moscú es muy consciente de que los representantes ucranianos no han podido proporcionar a Teherán ninguna documentación para corroborar el uso por parte del personal militar ruso de drones de origen iraní.
Las conversaciones dirigidas a la eliminación de las sanciones comenzaron en Viena, la capital de Austria, en abril del año pasado, meses después de que Joe Biden sustituyera a Trump.
A pesar del notable progreso, la indecisión y la procrastinación del país norteamericano provocaron múltiples interrupciones en las maratonianas conversaciones.
Cuatro días de intensas negociaciones entre representantes de la República Islámica y las cinco partes restantes del JCPOA (Alemania, Francia, el Reino Unido, Rusia, China) terminaron el 8 de agosto con un texto propuesto por la Unión Europea (UE) sobre la mesa.
Irán presentó su respuesta a la propuesta de la UE el 15 de agosto, una semana después de que concluyera la última ronda de conversaciones. Tras presentar su respuesta, Teherán instó a Washington a mostrar realismo y flexibilidad para llegar a un acuerdo.
Sin embargo, la administración de Biden tardó casi diez días en presentar su respuesta a los comentarios de Irán sobre el borrador de la UE.
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