Según los medios locales, las fuerzas palestinas de la Brigada Al-Quds han reivindicado el ataque contra objetivos israelíes, en respuesta a las incursiones de las fuerzas israelíes en la Mezquita Al-Aqsa, en Al-Quds (Jerusalén) en los últimos días, que ha enfrentado fuertes condenas internacionales.
Horas antes, se dispararon tres cohetes de represalia desde Siria contra los territorios ocupados por Israel, lo que hizo sonar las sirenas de alerta en varias zonas.
El miércoles, las fuerzas israelíes asaltaron la sala de oración de Qibli en la Mezquita Al-Aqsa, y agredieron brutalmente a al menos 20000 fieles palestinos, golpeándolos con garrotes y lanzándoles granadas aturdidoras, botes de gas lacrimógeno y balas de acero recubiertas de goma como medio para expulsarlos por la fuerza del lugar sagrado. En este ataque, 400 palestinos fueron arrestados y otros 100 resultaron heridos.
Cientos de ciudadanos británicos manifestaron el viernes frente a la Embajada de Israel en Londres y condenaron los crímenes del régimen de ocupación en la Mezquita Al Aqsa.
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