“Estoy seguro de que los funcionarios estadounidenses sabían sobre las reuniones (entre las partes iraní y saudí), porque tales cosas son muy difíciles de mantener en secreto, y los saudíes informarían ampliamente a los funcionarios estadounidenses sobre las negociaciones. Pero saber de ellos no es lo mismo que esperar el éxito de ellos”, dijo el historiador estadounidense en una entrevista con IRNA.
Dorsey dijo que la decisión de Irán y Arabia Saudí de reanudar las relaciones diplomáticas fue un acierto de ambas partes y agregó que el acto facilitaría la discusión de otros asuntos regionales, incluido el conflicto en Yemen.
Llamó a Ucrania la máxima prioridad de EEUU, por lo que distrae a EEUU de otros asuntos. El hecho de que Arabia Saudí, como aliado de Estados Unidos, esté progresando en las negociaciones con los tres principales partidarios de Rusia es muy decepcionante para Washington.
Según el analista estadounidense, tomar medidas para normalizar las relaciones ahora es solo una política realista. También tendría sentido si los saudíes estuvieran dispuestos a aliviar las tensiones con los países vecinos para poder gastar más en reformas internas y recortar el gasto en política exterior.
Hablando sobre el acuerdo nuclear con Irán, Dorsey dijo: “Creo que la administración de Biden calculó que el gobierno iraní quiere renovar el JCPOA más que EEUU, por lo que permitirá que los iraníes vengan a EEUU. Ninguna de las partes hizo concesiones significativas, luego estalló la guerra en Ucrania y hacer un trato con Irán cayó más abajo en la lista de prioridades de Estados Unidos. El JCPOA no es particularmente bien entendido ni popular en EEUU, por lo que restaurar el acuerdo nuclear antes de las elecciones no ayudará a Biden. La administración Trump tomó la decisión equivocada de retirarse del trato, y eso también dificultó que Biden volviera a él.
La mediación de China para normalizar las relaciones entre Irán y Arabia Saudí no inspiró miedo en Washington y probablemente hizo poco para obstaculizar los esfuerzos para volver al JCPOA, añadió.
En respuesta a una pregunta sobre el papel de China en la mediación entre Teherán y Riad, el profesor estadounidense dijo: “China tiene un objetivo simple: cambiar el orden mundial que estableció Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial. Durante muchos años, ha estado implementando la Iniciativa Cinturón y Ruta para atraer a varios países a su órbita. A medida que el país creció en poder económico y militar, también aspiró al poder diplomático.
Enfatizó que desempeñar un papel importante en Asia occidental por primera vez es una señal de éxito. También sospecho que el acuerdo comercial que China firmó con Irán hace dos años le da a Pequín una influencia significativa sobre Irán. Por lo tanto, creo que en algún momento en el futuro sabremos que China se asegurará de que Irán respete cualquier progreso con Arabia Saudí.
Al comentar sobre la situación en EEUU en caso de un cambio en el nuevo orden mundial, Dorsey declaró: “Si Donald Trump gana las elecciones presidenciales en 2024, entonces EEUU voluntariamente se retirará del liderazgo, en cuyo caso habrá un vacío.
Por otra parte, dijo que el régimen israelí ciertamente esperaba establecer relaciones normales con Arabia Saudí, por lo que el acuerdo entre Arabia Saudí e Irán debería decepcionar al régimen de Israel. No preveo más pasos para normalizar las relaciones entre el régimen de Tel Aviv y los estados árabes en el corto plazo, pero se han logrado avances asombrosos bajo la administración de Trump.
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