según medios locales, decenas de colones israelíes atacaron este martes a la localidad Huwaraen la Cisjordania y quemaron más de un centenar de los coches, donde dejaron más de 34 heridos palestinos.
La escalada de tensiones entre colones israelíes y palestinos en los territorios ocupados, se produjo después del brutal asalto del régimen sionista a la ciudad Yenin en la Cisjordania, en el que tres palestinos, incluido un menor de 13 años perdieron su vida y otros 28 resultaron heridos.
En reacción a las agresiones israelíes, se llevó a cabo un ataque de represalia por parte de los palestinos en la cercanía de la ciudad Ramala en Cisjordania, donde murieron cuatro israelíes y otros cuatro resultaron heridos.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha registrado 475 incidentes relacionados con colonos, que provocaron víctimas palestinas o daños a la propiedad, en los primeros cinco meses de 2023, el promedio diario más alto desde 2006. En el último mes, los residentes de Burqa, dijeron que los colonos armados les dispararon, prendieron fuego a los árboles y destrozaron casas y automóviles.
La comunidad internacional ha expresado repetidamente su preocupación por la violencia de los colonos, que alcanzó niveles récord el año pasado y ha seguido aumentando desde que el gabinete extremista del primer ministro, Benjamín Netanyahu, asumió el cargo en enero y aceleró la expansión de los asentamientos.
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