“La seguridad de la región del Golfo Pérsico es importante para la República Islámica de Irán, y los países de la región pueden garantizar la seguridad de esta región sin interferencia extranjera”, dijo Amir Abdolahian durante una conversación telefónica con su homólogo emiratí, Abdolá bin Zayed Al Nahyan.
El jefe de la diplomacia iraní condenó enérgicamente la profanación del Sagrado Corán en Suecia y Dinamarca y pidió una reunión de emergencia de los ministros de Relaciones Exteriores de los países miembros de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI).
También subrayó la necesidad de tratar con seriedad a los perpetradores de los actos recurrentes de profanación en Europa.
Por su parte, Abdolá bin Zayed Al Nahyan denunció la profanación de las santidades religiosas y los libros sagrados y acogió con satisfacción la propuesta de Amir Abdolahian de celebrar una reunión de emergencia de la OCI para discutir los incidentes.
El jueves pasado, y en medio de la estricta protección brindada por la policía sueca, un migrante iraquí volvió a profanar el libro sagrado de los musulmanes, esta vez, frente a la embajada de Iraq en Estocolmo
Anteriormente, el mismo iraquí, Salwan Momika, de 37 años prendió fuego el pasado 28 junio a un ejemplar del Corán frente a la mezquita más grande de la capital sueca de Estocolmo.
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