El mandatario persa efectuó estas declaraciones en un discurso ante la Conferencia Internacional sobre la Tormenta de Al-Aqsa y el Despertar de la Conciencia Humana celebrada en Teherán el domingo.
Describió a Palestina como la cuestión más importante del mundo musulmán y dijo que la liberación de Al-Quds es una prioridad del mundo musulmán.
El ayatolá Raisi destacó que a pesar de los esfuerzos destinados a presentar a quienes defienden su patria como malvados, ha quedado claro para el mundo que “el centro de todos los males son EEUU y algunos gobiernos occidentales que apoyan al régimen sionista.
“Hoy, el ganador de la batalla de Al-Aqsa es Palestina y el perdedor en el campo es el régimen sionista y sus partidarios”, resaltó.
Raisi advirtió además que la normalización de los vínculos con Israel no traerá seguridad ni para el régimen sionista ni para los estados regionales, asegurando asimismo que la ocupación no traerá legitimidad a este régimen.
El jefe del Ejecutivo iraní insistió que el régimen de Tel Aviv debería poner fin a su ocupación de Palestina y ser castigado por ello.
Y, al insistir que la humanidad espera que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) emita “un fallo justo” desafiando los intentos de los sionistas y estadounidenses de desviar la atención del juicio, reiteró que la defensa de Palestina y de los grupos de la Resistencia está en la agenda de la República Islámica.
HAMAS lanzó la Operación Tormenta de Al-Aqsa el 7 de octubre en respuesta a las violaciones de Israel en la Mezquita de Al-Aqsa y a la creciente violencia de los colonos contra los palestinos.
En respuesta, el régimen sionista lanzó una guerra genocida contra la sitiada Franja de Gaza que hasta ahora ha matado a más de 23.840 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, y ha herido a unos 60.317 más.
El régimen de Tel Aviv también ha impuesto un “asedio total” al territorio, cortando el combustible, la electricidad, los alimentos y el agua a los más de dos millones de palestinos que viven allí.
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