Olmert, que en reiteradas ocasiones ha expresado su oposición a la política actual de Netanyahu, añadió: “Netanyahu está tratando de prolongar la guerra y quiere destruir a Israel”.
El domingo pasado, Olmert también admitió que el régimen sionista siempre había subestimado el poder y la resistencia de Palestina, antes de la operación Tormenta de Al-Aqsa.
Y, al señalar la victoria de la Resistencia palestina frente al régimen sionista en la operación de Tormenta de Al-Aqsa, dijo: “Estábamos seguros de la gestión de la cuestión palestina y pensábamos que no hacía falta solucionarla”.
De igual modo, se refirió al desplazamiento de cientos de miles de sionistas residentes en el norte de los territorios ocupados, e insistió: “Los israelíes ya no confían en el gabinete de Netanyahu, y el mantenimiento de la vida de este gabinete no proporcionará la base para el regreso de los desplazados”.
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