Durante el encuentro, el Director General para Asuntos de Europa Occidental además de condenar esa acción hostil del gobierno alemán, que contradice los principios básicos del derecho humano, le informó a Hans-Udo Muzel la firme protesta de Teherán.
El funcionario iraní destacó los valiosos e inolvidables servicios prestados por los centros islámicos, incluido el Centro Islámico de Hamburgo, diciendo: “Desafortunadamente, lo ocurrido hoy en Alemania es un claro ejemplo del antiislamismo y la confrontación con las enseñanzas de las religiones abrahámicas cuya la otra cara es, por supuesto, el autoritarismo y la promoción deliberada de la violencia.
Agregó que a pesar de que algunas corrientes favorables al terrorismo, y partidarios de la violencia y el extremismo al formular acusaciones infundadas buscan alentar tensiones religiosas, los musulmanes de Alemania y los pueblos libres del mundo, gracias a su inteligencia, frustrarán estos planes.
En otra parte de sus declaraciones, el diplomático iraní advirtió al gobierno alemán contra las repercusiones de estas medidas destructivas, afirmando que medidas de este tipo constituyen un claro ejemplo de afrontar la libertad de expresión y de pensamiento, y prácticamente fomentan la violencia y el extremismo.
Por su parte, el embajador alemán anunció que informará el asunto a Berlín lo antes posible.
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