Esmaeil Baqaei Hamane, ha considerado la propuesta de esta resolución por parte de Canadá, EEUU, Alemania, Reino Unido y varios otros países occidentales, que son violadores de los derechos humanos y cómplices de los crímenes del régimen sionista en el genocidio del pueblo palestino, como una señal clara de la reducción del noble concepto de los derechos humanos a una mera herramienta para ejercer presión política sobre las naciones independientes.
“La República Islámica de Irán no duda en adoptar cualquier medida para proteger y promover los derechos humanos”, subrayó.
El vocero persa también se refirió a la participación del régimen racista israelí en la redacción y aprobación de la resolución, y dijo que esto es “un gran escándalo político y moral” para los fundadores occidentales, así como una señal de devaluación del elevado concepto de los derechos humanos y la perdida de filosofía existencial de las instituciones internacionales.
“Como un sistema democrático, la República Islámica de Irán se considera obligada a preservar y promover los derechos humanos y cumplir con sus obligaciones internacionales sobre la base de las políticas básicas estipuladas en la constitución, y mantiene una interacción constructiva con los mecanismos de derechos humanos de la ONU, incluida la Oficina del Comisionado y los órganos de tratados, y continuará esta cooperación en el futuro”, zanjó Baqai.
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