“Según los medios suecos, el hombre era Salwan Momika, un activista iraquí que quemó copias del Corán en protestas de 2023”, escribió el portal The Local Sweden.
Un tribunal de Estocolmo había acusado a Momika y a Salwan Najm de cometer delitos de odio.
Según los fiscales, además de la quema del Corán, Momika y Najm han dicho comentarios que podrían considerarse como una incitación al odio contra un grupo específico de personas.
Su comentario