En esta llamada telefónica, Al-Sudani transmitió su profundo pesar por el incidente ocurrido en el puerto de Shahid Rayaí, en Bandar Abbas, y extendió sus condolencias al gobierno y pueblo de Irán por las víctimas mortales. El primer ministro iraquí destacó que hubiera preferido que este diálogo se diera en circunstancias menos trágicas y aseguró que Irak está listo para brindar la ayuda necesaria.
Además, Al-Sudani citó enseñanzas coránicas sobre la unidad de la comunidad islámica, afirmando que los creyentes son como un solo cuerpo que sufre cuando una parte es afectada. También envió saludos al Líder supremo de Irán y deseó fortaleza y paciencia a las familias de las víctimas.
Por su parte, el presidente Pezeshkian agradeció el gesto de solidaridad y confirmó que las autoridades iraníes están investigando las causas del incidente. Aseguró que la situación está bajo control y que se están tomando medidas para evitar futuros incidentes, reiterando la importancia de la hermandad entre ambos países.
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