Durante una reunión con el presidente del Instituto cubano Finlay, Vicente Vérez Bencomo, Namaki explicó que ambos intercambiaron puntos de vista científicos sobre la efectividad de la vacuna.
Respecto a la rápida mutación del coronavirus, instó a las instituciones científicas de Irán, Cuba y de todo el mundo a estar preparadas para producir nuevas vacunas resistentes a las nuevas cepas.
Cada semana se producirán alrededor de 1,2 millones de dosis de vacunas COVIran Barekat, aseguró.
Anteriormente, el Instituto cubano Finlay y el Instituto Pasteur iraní habían anunciado en un comunicado que Teherán y La Habana están colaborando estrechamente en la producción de la vacuna.
“Cuba e Irán tienen un largo historial de cooperación en el sector biotecnológico. Y la colaboración entre nuestras instituciones en la producción de la vacuna contra el Covid-19 está basada en esa relación estratégica de investigación y desarrollo en las tecnologías de vacunología”, señalaba el comunicado.
“Este año se han intensificado nuestros contactos para llevar a cabo los ensayos clínicos, el proceso de transferencia y la optimización de la producción”, explicaron los responsables iraníes y cubanos, destacando que esa cooperación condujo a la producción de la vacuna en Irán tras el éxito de los ensayos clínicos de la tercera fase.
La cooperación entre estas dos prestigiosas instituciones tendrá sin duda un impacto positivo en la salud de nuestras gentes, concluyeron.
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