El Oporto remontó la ventaja inicial del Sporting gracias al español Pablo Sarabia, y ganó en el estadio Jose Alvalade (1-2) para poner un pie en la final de la Copa de Portugal que aún deber ratificar en el partido de vuelta del estadio Do Dragao.
Cinco minutos de inspiración a la hora de partido plasmaron la reacción del cuadro de Sergio Conceicao que aspira a su trigésima segunda final en la competición y a su decimoctavo título, el último en el 2020.
El Sporting se enredó en un choque que tenía controlado desde el inicio de la segunda parte cuando Pablo Sarabia, con un zapatazo desde la media luna, batió a Agustín Marchesin tras recibir un pase del también español Pedro Porro.
Diez minutos le duró la ventaja al equipo local porque una falta dentro del área de Porro fue sancionada con un penalti que transformó el iraní Mehdi Teremi para igualar el choque.
El empate alteró al conjunto de Rubén Amorim e impulsó al Oporto. Así, cinco después fue el brasileño Evanilson el que volvió a batir a Antonio Adán al culminar un balón recibido de Mehdi Teremi.
Fuente: es.besoccer.co
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