Durante su reunión con el presidente de Siria mantenida el domingo por la mañana, el mandatario persa añadió: "Lo que estamos presenciando hoy en Asia Occidental es el cumplimiento de la predicción del líder de la Revolución Islámica de que la resistencia de las naciones contra los opresores y agresores dará sus frutos".
Raisi conmemoró a los mártires de la Resistencia de Siria e Irán, incluido el mártir Hay Qassem Soleimani, y apreciando la valentía de los combatientes del Mundo Islámico contra el terrorismo, señaló: "Los combatientes de la resistencia han demostrado que son una fuerza confiable para establecer la estabilidad y la seguridad en la región, incluida Siria".
El presidente de Irán enfatizó la necesidad de que todos los estados deben respetar a la soberanía y la integridad territorial de Siria, recordando: "Irán apoyó al pueblo y al gobierno sirios cuando algunos dirigentes árabes y no árabes en la región apostaban por el momento de la caída del gobierno sirio".
El ayatolá Raisi destacó que la valentía del ejército sirio y las fuerzas defensivas nacionales, así como los combatientes de la Resistencia Islámica en la región, especialmente el heroico Hezbolá, desempeñó un crucial papel en el secado de las raíces del poder militar del grupo terrorista Daesh y otros grupos terroristas que representaban una amenaza para la seguridad de toda la región.
El presidente iraní lamentó que partes importantes del territorio sirio aún estén ocupadas por fuerzas extranjeras, enfatizando: "Toda la tierra siria debe liberarse de los ocupantes extranjeros. Esta ocupación no debe estar sujeta al paso del tiempo, y las fuerzas de ocupación y sus mercenarios deben ser expulsados".
Raisi se refirió a las agresiones del régimen israelí, insistiendo: "Las amenazas del régimen sionista en la región deben abordarse fortaleciendo y diversificando las ecuaciones de disuasión".
En otra parte de sus declaraciones, el mandatario iraní destacó la importancia de promover la cooperación y la coordinación entre Irán y Siria, indicando la seria determinación y voluntad de Teherán de mejorar el nivel de las relaciones con Damasco, particularmente en los campos de la economía y el comercio.
Por su parte, Bashar al-Assad señaló la disposición de su país para una mayor la cooperación y coordinación con Irán en los campos de economía, política y de seguridad.
El presidente sirio describió las relaciones entre Teherán y Damasco como estratégicas,recordando: "En los años de resistencia y confrontación con la agresión occidental y takfirí, Irán fue el único país que estuvo a nuestro lado desde el principio".
"Los acontecimientos en la región después de una década de guerra contra el eje de la resistencia han demostrado que la resistencia es efectiva y fructífera", insistió al-Assad, resaltando: "Hemos demostrado que al trabajar en estrecha colaboración con los países de la región, podemos derrotar a Estados Unidos y a las potencias hegemónicas que afirman ser superpotencias”.
El presidente sirio enfatizó que Estados Unidos está perdiendo su papel en la región.
Al-Assad agradeció el apoyo de la República Islámica de Irán a la nación siria en la lucha contra el terrorismo, concluyendo: "El pueblo y el gobierno sirios están agradecidos con el pueblo iraní y se consideran comprometidos y en deuda con Irán".
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