En declaraciones efectuadas este jueves a la prensa, Siavash Moslemi añadió que entre los objetos confiscados a los alborotadores se encontraban armas hechas en mano, navajas, diferentes tipos de máscaras, así como drogas y bebidas alcohólicas.
Según Moslemi algunas alborotadoras ocultaban los objetos hechos en mano bajo su velo para luego dañar a las fuerzas de seguridad.
El comandante puso de relieve que los recientes disturbios son una guerra mediática que la arrogancia global ha iniciado contra la República Islámica de Irán, destacando que en muy pocos países del mundo la libertad de las mujeres en el campo social es al igual que la de las féminas iraníes.
Moslemi concluyó que el enemigo, al defender claramente a los disturbios demostró que lo que busca no es la reivindicación de los derechos de la mujer, sino es el derrocamiento de la República Islámica.