Raisi efectuó estas declaraciones en la reunión de gabinete, durante la cual expresó su simpatía por el martirio de varios ciudadanos durante el ataque terrorista a los peregrinos del santuario de Shah Cheragh en Shiraz, en el sur de Irán.
Además elogió la participación masiva del pueblo en las ceremonias fúnebres de los justos mártires de este atentado en varias ciudades iraníes.
Refiriéndose al aumento del odio público hacia los terroristas y alborotadores, agregó que los funcionarios están obligados a hacer todo lo posible para mantener la paz y la seguridad del país y prestar servicios al pueblo y remover los obstáculos que entorpecen sus negocios, educación y vida diaria.
Raisi consideró que el mensaje de las masas que recorrían las calles de Shiraz y otras ciudades para llorar a los mártires del atentado era condenar el ataque terrorista al santuario de Shah Cheragh, así como confrontar a los terroristas y brindar y garantizar la seguridad del país.
El pasado 26 de octubre, un terrorista armado con una ametralladora abrió fuego contra los peregrinos y los fieles en el santuario sagrado de Shah Cheragh en Shiraz, y martirizó a 15 personas inocentes, incluidas algunas mujeres, niños y ancianos, e hirió gravemente a decenas más. El grupo terrorista Daesh se atribuyó la autoría del atroz ataque.
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