En una reunión celebrada para estudiar la resolución sobre la situación en Afganistán, Iravani afirmó que la actual situación humanitaria y política en Afganistán es un indicador de las malas consecuencias de la intervención de fuerzas extranjeras bajo el pretexto de combatir el terrorismo y establecer la paz y la democracia en otros países, además de la profanación de las ideas trascendentes comunes a la humanidad, obliga a países y pueblos a enfrentar un sinfín de peligros.
Sintió que la situación actual en Afganistán implica responsabilidad y obligaciones para las fuerzas extranjeras, y agregó: “Irán comprende la necesidad de realizar investigaciones sobre los crímenes de guerra cometidos por las fuerzas de ocupación en el pasado y que ahora han terminado debido a la presión política de los países”.
El diplomático iraní expresó su apoyo a la adopción de una resolución sobre la situación en Afganistán, diciendo que la adopción de esta resolución es una clara señal de unidad en el apoyo al pueblo afgano en el camino hacia el logro de la prosperidad basada en la paz y confianza en sí mismo.
Dijo que el futuro de Afganistán depende de la implementación y el cumplimiento de la Constitución para garantizar la participación y el respeto de los derechos de todos los grupos étnicos, religiones, mujeres y niñas.
Condenó la continua amenaza del terrorismo y los combatientes extranjeros, los actos terroristas contra los centros educativos y diplomáticos y las minorías religiosas y étnicas, y afirmó que el mundo debe asegurarse de que la tierra de Afganistán no sea un refugio seguro para grupos terroristas como Daesh, Al-Qaeda y grupos afiliados.
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