En una entrevista concedida al canal iraquí Al-Akhbariya Alireza Enayati se refirió al reciente acuerdo entre la República Islámica de Irán y Arabia Saudí para la reanudación de las relaciones diplomáticas, y destacó que la recuperación de las relaciones entre Irán y Arabia Saudí puede acelerar la solución de los problemas de seguridad.
También hizo resaltar el papel desempeñado por China como mediador de los diálogos diplomáticos entre Teherán y Riad, aseguró Enayati que, lo que se logró en China fue el resultado de cinco rondas de reuniones de negociaciones que se llevaron a cabo en los últimos dos años en Bagdad (Capital de Irak).
“De hecho, estamos muy agradecidos de los esfuerzos de Irak que tuvieron como objetivo, la reanudación de los lazos entre Irán y Arabia Saudí” dijo el titular iraní para luego afirmar “el papel de Irak al final de estas negociaciones era muy importante, y la participación de Bagdad en estas negociaciones no fue solo de monitoreo, sino que también fue eficaz, práctico y activo.
En otra parte de sus declaraciones, el asesor del ministro de Exteriores de Irán, afirmó que el acuerdo que se logró en China fue en realidad, un entendimiento bilateral entre Irán y Arabia Saudí que encaminó a la reanudación de las relaciones y el Gobierno chino fue el observador y anfitrión de estas negociaciones y no impuso nada a las partes del convenio.
En alusión a las negociaciones que condujeron a la reanudación de los lazos bilaterales entre Teherán y Riad, indicó el alto cargo iraní que la ruptura de las relaciones diplomáticos con Arabía Saudí había dado lugar a una situación precaria a la que los enemigos intentaban aprovechar.
Al afirmar que el acuerdo entre Irán y Arabia Saudí tiene efecto en muchas variables de la región Asia Occidental y del mundo, el diplomático declaró que: “El mundo islámico necesita respirar la atmósfera de unidad y adoptar una posición unificada, especialmente en cuanto al tema de palestina; los países musulmanes no deben permitir discordia entre si y creo que este acuerdo tendrá un efecto significativo en cuanto al tema de nuestra tierra hermana de Palestina.
Enayati explicó que Irán y Arabia Saudí no tenían ningún tipo de relación diplomática entre sí desde 2016, salvo la comunicación limitada que se hacía a través de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización de la Conferencia Islámica y también la embajada de Suiza hasta que Irak estableció estas reuniones y organizó las negociaciones entre ambos países. “Esto es gracias a la esencia de las relaciones entre los países de Asia Occidental que alberga países como Irán, Irak, Catar, Bahréin y Arabia Saudí, es decir, países que comparten la cultura y la historia similar y que se asemejan a un río integro.