El Ministerio de Exteriores de China ha anunciado este domingo que, Pekín respalda la idea de crear una alianza naval entre las Armadas de los países del Golfo Pérsico.

En una rueda de prensa mantenida este sábado en Pekín, el Portavoz de la Cancillería de China, Wang Wenbin, ha declarado que su país apoya los procesos que brindan estabilidad en el Golfo Pérsico, lo cual da lugar a un suministro sostenible de energía para todo el mundo.

“Mantener la paz y la estabilidad en la región del Golfo Pérsico situada en Medio Oriente afecta el bienestar de los países y pueblos de la región y es de vital importancia para mantener la paz mundial, fortalecer el crecimiento económico global y garantizar el suministro sostenible de energía”, ha aseverado.

Así mismo, el funcionario indicó que Pekín aboga por la resolución de las disputas respectivas y busca mejorar la política de “buena vecindad” a través de la mesa de diálogo y la consulta entre los países de la región del Golfo Pérsico.

Las declaracioens de Wenbin se producen después de que el portal catarí Al-Jadid informara el viernes que Irán, Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Omán formarán una fuerza naval conjunta para mejorar la seguridad marítima en el Golfo Pérsico.

Esto mientras que, el comandante de la Fuerza Naval del Ejército de Irán, el contralmirante Shahram Iraní, dijo el mismo viernes que los países de la región han llegado al punto de que si se quiere establecer la seguridad, se puede hacerlo a través de la sinergia y la cooperación entre los propios países regionales; pues se están formando coaliciones regionales, añadió.

No obstante, la preocupación de Washington por esta alianza se expresó en las afirmaciones del comandante Timothy Hawkins, vocero de la V Flota de la Armada estadounidense, que en declaraciones concedidas el sábado al portal Breaking Defense, alegó que una alianza naval con Arabia Saudí y otras naciones del Golfo Pérsico “desafía la razón”.

A continuación, Hawkins repitió los mismos alegatos sin fundamento de Washington de que Irán es la causa de la “inestabilidad regional” pues no puede formar “una alianza de seguridad naval” para proteger las aguas “que amenaza”.

Eso mientras, la República Islámica ha advertido siempre que la seguridad del Golfo Pérsico y el estrecho de Ormuz es su línea roja y dejado claro que sus Fuerzas Armadas monitorean cualquier movimiento de los buques enemigos en estas aguas estratégicas. Teherán ha pedido repetidamente la expulsión de las fuerzas estadounidenses y otros países de la región, culpándolos de llevar a cabo actividades militares desestabilizadoras y alimentar las tensiones entre los países de la zona.