Amir Saeid Iravani efectuó estas declaraciones en una sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre el caso de armas químicas de Siria, añadiendo: “Irán condena una vez más el uso de armas químicas por cualquier persona, en cualquier lugar y bajo cualquier circunstancia. El uso de tales armas letales es una violación flagrante del derecho internacional, constituye un crimen de lesa humanidad y representa una grave amenaza para la paz y la seguridad internacional”.
“Irán ha sido una de las principales víctimas de las armas químicas. El 28 de junio de 1987, la ciudad de Sardasht en Irán sufrió un devastador ataque con armas químicas que provocó un inmenso sufrimiento y la pérdida de civiles inocentes, incluidas mujeres y niños”, recordó.
Así mismo, criticó a ciertos países occidentales, incluidos Francia, el Reino Unido y los Estados Unidos, por apoyar y colaborar con el régimen de Saddam durante la guerra de Irak contra Irán, señalando: “Su complicidad permitió el uso sistemático de armas químicas contra el pueblo iraní, un acto que no debe olvidarse”.
“El silencio o la participación activa de los países occidentales en estas atrocidades socavaron la búsqueda de justicia y revelaron un doble rasero flagrante. Esto también obstaculizó la capacidad del Consejo de Seguridad de la ONU para cumplir con sus responsabilidades y responsabilizar a los perpetradores por crímenes tan atroces”, agregó.
En otra parte de sus declaraciones, el enviado persa señaló: “La República Árabe Siria se mantiene firme en su compromiso de cumplir con sus obligaciones en virtud de la Convención sobre Armas Químicas. En consonancia con este compromiso, el Gobierno sirio ha mantenido un enfoque constructivo y cooperativo hacia la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ). El informe de la Secretaría confirma que las 27 instalaciones de producción de armas químicas (CWPF) declaradas en Siria han sido destruidas con éxito”.
“Para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas, Siria ha estado presentando periódicamente informes mensuales sobre el progreso del desmantelamiento de armas químicas. En mayo y junio de 2023, Siria presentó sus informes mensuales 114º y 115º al Director General de la OPAQ, proporcionando detalles de las actividades realizadas para desmantelar las armas químicas y sus instalaciones de producción”, agregó, destacando: “A través de estas acciones, Siria está demostrando activamente su dedicación para cumplir con sus obligaciones y cooperar con la OPAQ en la búsqueda de la erradicación completa de las armas químicas dentro de su territorio”.
Iravani insistió: “Apoyamos totalmente la promoción de un diálogo constructivo entre Siria y la OPAQ al más alto nivel, estableciendo un marco de tiempo específico para abordar cualquier problema pendiente y llevar el archivo a un cierre definitivo y concluyente. Este enfoque garantizará la transparencia, la rendición de cuentas y una resolución satisfactoria de todos los asuntos pendientes relacionados con las armas químicas en Siria”.
“La integridad y la credibilidad de la OPAQ, como organismo internacional, dependen de su capacidad para permanecer neutral y objetiva, guiada únicamente por consideraciones científicas y técnicas. Este enfoque es esencial para prevenir eficazmente el uso de armas químicas y promover los objetivos de la Convención. Además, cualquier investigación debe ser imparcial, profesional, confiable y objetiva. Dichas investigaciones deben cumplir plenamente con los requisitos y procedimientos descritos en la Convención.
Para abordar de manera efectiva los problemas no resueltos y mantener la naturaleza técnica de las discusiones, es crucial evitar politizar el asunto y emplear dobles raseros. Al hacerlo, podemos trabajar por la justicia, la rendición de cuentas y la prevención de más atrocidades”, concluyó el diplomático iraní.