Salwan Momika, un refugiado iraquí de 37 años que vive en Suecia, y Salwan Najem patearon y pisotearon el Sagrado Corán, prendieron fuego a sus páginas, como lo habían hecho anteriormente frente a la mezquita principal de Estocolmo a fines de junio, lo que provocó indignación y condena de musulmanes de todo el mundo.
Un mes después, Salwan Momika pisoteó el libro frente a la embajada iraquí.
Irán reitera que manos del régimen de Israel están detrás de las profanaciones del Corán en Europa.
“En la incitación a insultar el sagrado Corán, se pueden ver las manos del régimen sionista detrás de la cortina”, indicó la semana pasada el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Naser Kanani, en un mensaje de Twitter.
El 3 de agosto, el Ministerio de Inteligencia de Irán reveló en unos documentos, el apego del perpetrador de quema al Sagrado Corán en Suecia al régimen de Israel.
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