Smotrich añadió que las protestas de las familias de los prisioneros palestinos solo aumentan el precio que Hamas exige por la liberación de los prisioneros.
A pesar de que han pasado casi cuatro meses desde el ataque a Gaza, el régimen israelí no ha logrado sus objetivos declarados de destruir a Hamas y liberar a los prisioneros.
La intensificación de las diferencias entre los líderes del régimen israelí y el aumento de las protestas generalizadas contra el gabinete de Netanyahu en los territorios ocupados han aumentado la presión sobre los derechistas gobernantes para que se rindan ante la resistencia palestina.