Este ataque tiene sus raíces en varios factores sociales, políticos y de seguridad, que analizamos a continuación:
1- El fracaso del régimen sionista en lograr los objetivos declarados en Gaza; transcurridos casi seis meses desde la Tormenta de Al-Aqsa y el ataque total del régimen sionista al enclave costero, este régimen no ha alcanzado sus objetivos declarados, incluido el asesinato de algunos comandantes de HAMAD, como Yahya Sinwar y Mohammad Zaif, etc.
2- Las disensiones internas y el aumento de protestas; como consecuencia de los fracasos antes mencionados, Israel ha enfrentado tensiones y disputas internas sin precedentes, lo cual ha llevado a la formación de protestas más amplias en ese régimen.
3- Ante no poder eliminar a las figuras claves de HAMAS y de la Yihad Islámica, los sionistas atacaron un objetivo obvio y accesible.
4- Por un lado, las negociaciones entre Israel y HAMAS están en curso en El Cairo, y al llevar a cabo esta operación, este régimen ha tratado de sumar puntos en dichas negociaciones.
5- Por otro lado, los sionistas buscan una respuesta apresurada de Irán para reducir la presión multilateral sobre sí mismos.
6- Este ataque muestra que el régimen sionista se ha vuelto más insolente después de ataques y asesinatos anteriores y esta vez atacó el centro diplomático de Irán.