Teherán, IRNA- “Cualquier país de la región que descuide los objetivos hegemónicos de Estados Unidos y el régimen sionista ignorará los intereses de su nación y provocará la ira de las naciones musulmanas”, dijo el presidente iraní, Seyed Ebrahim Raisi.

El mandatario iraní efectuó estas declaraciones en una llamada telefónica con su homólogo iraquí Barham Saleh, enfatizando la necesidad de una cooperación efectiva y activa con Iraq para establecer la estabilidad y la seguridad en la región.

Felicitó la llegada del mes sagrado del Ramadán y deseó bendiciones divinas al pueblo iraquí y a todos los musulmanes del mundo, enfatizando que la República Islámica de Irán apoya la unidad, la independencia, la seguridad y la promoción de la posición regional e internacional de Iraq.

“Consideramos que la más mínima inseguridad en Iraq va en detrimento de toda la región, por lo que saludamos la realización de los intereses del pueblo iraquí y el establecimiento de un gobierno fuerte en este país”, señaló.

Al enfatizar que Teherán y Bagdad no solo son vecinos, sino que las dos naciones tienen una relación de hermandad y parentesco, Raisi dijo: “Se han dado buenos pasos para desarrollar y profundizar las relaciones entre los dos países y estamos decididos a promover el nivel de las relaciones y la cooperación entre los dos países en todos los campos a la plena capacidad y el desarrollo de las relaciones bilaterales y regionales entre Teherán y Bagdad, y conducir a relaciones más estrechas a nivel internacional”.

Hizo hincapié en los esfuerzos por establecer la seguridad y la paz en la región sin la interferencia de extranjeros y afirmó: “El paso del tiempo ha demostrado la legitimidad de la declaración del Líder Supremo de que Estados Unidos no simpatiza con las naciones musulmanas de la región, especialmente Iraq, y hoy, ha quedado claro para todos que los forasteros solo persiguen sus propios intereses y dominación”.

“Cualquier país de la región que descuide los objetivos hegemónicos de Estados Unidos y el régimen sionista ignorará los intereses de su nación y provocará la ira de las naciones musulmanas”, añadió.

En esta llamada telefónica, felicitando la llegada del Ramadán, el presidente iraquí, Barham Saleh, destacó la necesidad de cooperación entre los dos países para superar los desafíos regionales y dijo: “Establecer estabilidad y seguridad en la región es muy importante y en este sentido, esperamos el papel activo de la República Islámica de Irán”.

“Teherán y Bagdad tienen muchas metas y objetivos comunes a nivel regional e internacional, y al fortalecer el nivel de cooperación y coordinación, podemos tomar medidas útiles y efectivas para garantizar los intereses de nuestras naciones y las naciones de la región”, añadió.

“La solución a las crisis en la región es meramente con la voluntad de los propios países y las soluciones intrarregionales sin la interferencia de terceros”, señaló.

Al enfatizar la importancia de desarrollar las relaciones comerciales y económicas entre los dos países, Barham Saleh dijo: “Las capacidades económicas de los dos países pueden servir a los intereses de las dos naciones”.

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