Durante los días 4 y 5 de abril, Gabriel Boric en una visita marcada por simbolicismo a argentina realizó su primer viaje oficial internacional como Presidente de Chile, en una reunión com su homólogo, Alberto Fernández en su primera visita internacional a un país extranjero.
Según Francisca Quiroga, la cientista política y experta en comunicación política, esta visita es una señal política relevante considerando un eje común entre ambos estados que abogaron por la unidad de América Latina y la relación bilateral.
La visita del mandatario chileno a Argentina estuvo marcada por simbolismos y los gestos de unidad que han mantenido ambos presidentes y que quedaron de manifiesto en la asunción de Boric el pasado 11 de marzo, a la cual Alberto Fernández llegó con una nutrida comitiva de ministros, legisladores y gobernadores de provincias fronterizas con Chile, informó Sputnik Mundo.
"Tenemos una mirada común sobre muchos problemas y pensamos parecido", dijo Fernández en esa oportunidad y destacó la "gran expectativa" que genera la juventud de Boric en la región.
pese a las diferencias que ambos países arrastran por los límites de la plataforma continental, dos líderes abogaron por la unidad de América Latina y el refuerzo de la relación bilateral.
"Si bien durante mucho tiempo estuvimos mirando en otras direcciones, ya sea al norte o al Pacífico, con relaciones que nos interesa mantener y profundizar, nuestra base es América Latina. Chile es un pueblo latinoamericano, y desde ahí vamos a construir comunidad, región, cooperación e internacionalismo", dijo el izquierdista Boric al comparecer junto a Fernández, de perfil progresista.
La cientista política explicó que el escenario de Argentina, Bolivia, Chile y Perú, además de un posible triunfo de Gustavo Petro en Colombia, podría ser favorable para pensar en una política de cooperación latinoamericana, de integración, y con mirada de derechos sociales.
Todos estos proyectos políticos de izquierda que han ganado las elecciones en sus respectivos países, podrían generar un cambio en la política regional latinoamericana.