“Hubo mucha plata detrás del golpe [de Estado]”, denunció el sábado el expresidente de Bolivia Evo Morales (2006-2019), en alusión al “golpe de Estado” en su contra en 2019.
El líder indígena comentó que los intereses para apartarlo del poder en noviembre de 2019 versaron en torno a las grandes reservas de litio boliviano, que rondan los 21 millones de toneladas y son catalogadas como las mayores del mundo según el Servicio Geológico de Estados Unidos.
El expresidente boliviano, quien se encuentra en Cuba para presentar el libro “Evo: Operación rescate. Una trama geopolítica en 365 días” en la Feria Internacional del Libro, aclara que en aquel momento se renunció para ¨evitar una masacre¨ en Bolivia.
El mandatario indígena mencionó como prueba las palabras del dueño de la empresa estadounidense de autos eléctricos Tesla, Elon Musk, quien por esos días escribió en Twitter: "Daremos un golpe de Estado a quien queramos".
El volumen, recoge en forma de novela documentada la operación que siguió a la renuncia televisada de Morales el 11 de noviembre de 2019 e incluye detalles de la salida del exgobernante boliviano rumbo a México, por vía aérea, y luego a Argentina, donde estaba hasta su regreso a Bolivia con el triunfo del delfín político Luis Arce.
El golpe 2019 contra Morales en Bolivia
Tras el triunfo y la reelección de Morales como presidente del país latinoamericano en los comicios presidenciales de ese año, la oposición no aceptó el resultado e inició una serie de protestas, con el apoyo de jefes policiales y militares, por lo que el mandatario tuvo que renunciar para evitar el derramamiento de sangre en las calles.
Ante esta coyuntura, la senadora opositora Jeanine Áñez se autoproclamó presidenta interina de Bolivia, pese a no cumplir con los requisitos constitucionales para ello, lo que enfureció a los partidarios de Morales, quienes salieron a las calles y enfrentaron con una brutal represión policial.
El exjefe de Estado boliviano ha insistido en retiradas ocasiones que lo sucedido en su contra fue un “golpe de Estado” orquestado por la oposición, respaldada a su vez por la Organización de Estados Americanos (OEA) y EE.UU.