A continuación, el mensaje del Líder de la Revolución Islámica:
En el nombre de Dios, Clemente y Misericordioso
El abyecto crimen que ha ocasionado en el santuario purificado de Ahmad ibn Musa (con ellos la paz), bien el martirio, bien lesiones a decenas de hombres, mujeres y niños inocentes tiene sumidos los corazones en el duelo y la pesadumbre. El autor o autores de este luctuoso crimen recibirán con toda certeza su castigo, pero ni el dolor por los seres queridos ni la profanación del santuario de la Ahl ul-Bait, la Familia del Profeta (con ellos la paz), pueden ser compensados si no es indagando el origen de que se perpetren tales calamidades y tomando al respecto medidas sabias y tajantes. Ante la acción instigadora del enemigo y sus agentes traicioneros, ignorantes o inconscientes, a todos nos incumben ciertos deberes. Desde los cuerpos de seguridad y el sistema judicial hasta quienes operan en los campos del pensamiento y la divulgación, así como el común de nuestro querido pueblo, han de actuar todos como un solo hombre frente a la corriente que considera admisibles la indiferencia y el desprecio por la vida de la gente, por su seguridad y por cuanto para ellos es sagrado. Nuestro querido pueblo y los organismos competentes se impondrán con toda certeza a la malévola y pérfida confabulación de los enemigos, Dios mediante.
Quien esto suscribe presenta sus condolencias a las familias en duelo, al pueblo de Shiraz y a toda la nación iraní, y ruega a Dios Altísimo por la curación de los heridos.
Seyed Alí Jameneí
27 de octubre de 2022
Fuente: KHAMENEI.IR