En una conversación telefónica con Mohamad Ahmadi, encargado de negocios temporal de la embajada iraní, el canciller Hosein Amir Abdolahian examinó la situación después de que un grupo de elementos antiraníes se reunieran ilegalmente frente a la misión y agredieran a un empleado.
Por su parte, Ahmadi dijo que poco después del acto ilegal, una fuerte denuncia en Teherán y Estocolmo fue transferida al lado sueco, enfatizando la necesidad de identificar y castigar a los perpetradores del ataque.
El encargado de negocios temporal de la embajada iraní agregó que en reuniones y llamadas telefónicas, los funcionarios suecos se disculparon por el incidente y enfatizaron el compromiso de Suecia de mantener y garantizar la seguridad de la embajada y su personal bajo la Convención de Viena.
“En este sentido, cinco agresores fueron arrestados con la cooperación de la policía sueca. La cuestión se seguirá hasta que los autores del ataque sean condenados", destacó.