El Ayatolá Seyed Ebrahim Raisi, el miércoles por la tarde, continuando con sus planes de un día en Sri Lanka, asistió a la mezquita Kalpitiya en la ciudad de Colombo, donde, al encontrarse y conversar con los fieles, también realizó la oración del Magreb en esta mezquita.
El presidente expresó su satisfacción por estar entre los fieles en la mezquita Kalpitiya en la ciudad de Colombo, y expresó la esperanza de que las negociaciones entre los dos países conduzcan a una mayor expansión de las relaciones y la cooperación entre ellos.
El presidente consideró la unidad como una necesidad esencial y vital en el mundo islámico hoy, y dijo: Los enemigos, encabezados por Estados Unidos, buscan crear inseguridad, masacres y división en el mundo islámico al establecer grupos terroristas como ISIS, por lo tanto, es muy necesario evitar cualquier acción o discurso que genere división entre los musulmanes.
El Ayatolá Raisi consideró que la opresión sin precedentes del régimen sionista y la masacre y el genocidio en Gaza son el resultado de las diferencias en la comunidad islámica, y agregó: El Imam Jomeini (P) consideró al régimen sionista como un tumor canceroso para la seguridad de la región hace 45 años y enfatizó en la liberación de Palestina como la principal cuestión del mundo islámico. Hoy en día, la veracidad de estas palabras del Imam ha quedado clara para todos.
El presidente declaró: La República Islámica de Irán considera la defensa de los derechos de los palestinos como un deber de todos los musulmanes y personas libres del mundo, y cree que hoy en día apoyar a aquellos que defienden su hogar, patria, religión, honor y dignidad es un indicador para los países de si están defendiendo la dignidad o colaborando con la maldad.
El Ayatolá Raisi señaló: Estados Unidos ha impuesto sanciones injustas al pueblo iraní por defender la justicia y los derechos, pero nuestros jóvenes han convertido las amenazas en oportunidades, y hoy en día Irán está progresando en todos los ámbitos. El enemigo intentó detener el progreso de Irán, pero el pueblo iraní tuvo la voluntad de avanzar, y en esta guerra de voluntades, la voluntad del pueblo iraní triunfó.