Tras una oportuna misión de los servicios de Inteligencia, la policía de Miryave identificó el alijo de los narcotraficantes, confiscando más de 1.036 Kg de opio y 100 Kg de hashish en galones de 60 litros, explicó el comandante Mohamad Molashahi.
Asimismo, añadió que dos Kalashnikovs, ocho cargadores, 148 balas y un furgoneta Toyota fueron requisadas también por las fuerzas iraníes.
Irán se encuentra en la ruta principal del contrabando de drogas desde Afganistán a Europa, y está a la vanguardia en la lucha contra el narcotráfico. Por ese motivo, Irán ha sufrido un gran número de bajas (más de 4.000 miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad han resultado mártires), e ingentes cantidades económicas han sido destinadas a esa lucha.
Las organizaciones internacionales nunca han contribuido ni ayudado realmente a Irán en la lucha contra el narcotráfico.
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