En declaraciones efectuadas en el marco del consejo de ministros celebrado hoy, Biyan Zangane señaló que la crisis del coronavirus ha provocado una fuerte reducción del consumo de petróleo, pues una parte muy importante del sector aéreo se ha visto obligado a suspender sus actividades.
El ministro añadió que las estimaciones para el segundo trimestre de 2020 indicaban que el mercado afrontaría un superávit de 3 millones de barriles; sin embargo, en la última reunión de la OPEP se comprobó que superaba los 14 millones de barriles, lo cual significa que la pandemia del coronavirus ha reducido la demanda en 11 millones de barriles más de lo esperado.
Según Zangane, la situación de las reservas y las demandas de petróleo, así como las incertidumbres sobre el final de la pandemia del coronavirus han intensificado los problemas.
Y respecto a la brusca caída del precio del petróleo Brent y de la cesta de la OPEP por debajo de los 20 y los 14,5 dólares respectivamente, el ministro recordó que no se habían visto esos precios en el mercado desde hacía años.
Zangane subrayó que los países miembros y no miembros de la OPEP deben inexorablemente reducir la producción de oro negro, pues las medidas adoptadas por la OPEP no serán suficientes.
Con el objetivo de restablecer el equilibrio en los mercados del petróleo, todo el mundo debe cooperar estrechamente, al igual que en la lucha contra el coronavirus, concluyó.
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