Abdul-Malik al-Houthi afirmó en su discurso que el régimen de Israel continúa cometiendo los crímenes más atroces en Gaza, que han llevado a un genocidio, y añadió que el enemigo, con toda su audacia, declara los hospitales como objetivos militares, lo que demuestra su bancarrota moral y política.
Al-Houthi enfatizó que el mundo está en silencio frente al sufrimiento horrendo del pueblo de Gaza y su privación de medicinas, incluso de cápsulas de oxígeno, y solo se queda mirando.
El líder de Ansarolá destacó que los invasores están matando a niños y mujeres en Gaza con balas y misiles estadounidenses, británicos y alemanes.
Asimismo, agregó que el bloqueo severo en la Franja de Gaza continúa y, entre los desplazados, algunos están perdiendo la vida debido al hambre. Además de los asesinatos, la destrucción y los desplazamientos, el enemigo tiene como objetivo la infraestructura y Estados Unidos ha aceptado completamente esta campaña.
El líder mencionó que la campaña contra la impunidad de los crímenes en Gaza se lleva a cabo después de la decisión de la Corte Internacional de Justicia de detener los asesinatos y genocidios. También enfatizó la necesidad de enviar alimentos y medicamentos a Gaza y detener los crímenes de genocidio.
Al-Houthi criticó la debilidad de la sentencia de la Corte Internacional de Justicia, considerándola desproporcionada ante los crímenes cometidos por el régimen de Israel contra el pueblo de Gaza.
Además, señaló la falta de acción por parte de la comunidad internacional para detener los crímenes sionistas y menciona la influencia de Estados Unidos en las instituciones internacionales, lo que exime a Israel de cumplir con las decisiones y posiciones adoptadas por dichas instituciones.
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