Los puntos más significativos de la carta de Zahra Ershadidirigida al presidente del Consejo de Seguridad son los siguientes:
Le escribo en relación a la carta de fecha 12 de abril de 2021 (A/75/852–S/2021/347) de la República Islámica de Irán, en la cual le informábamos del acto terrorista del régimen israelí contra el Centro de Enriquecimiento de Combustible de Natanz el 11 de abril de 2021 queinterrumpió las operaciones de la instalación nuclear, sometida a las salvaguardas del Organismo Internacional de la Energía Atómica y a una exhaustiva supervisión.
En una entrevista reciente, el primer ministro del régimen israelí reconoció, aunque implícitamente, los ataques encubiertos de Israel contra el programa nuclear pacífico iraní y declaró descaradamente que ese régimen continuará con esos ataques. A eso le siguieron otras descaradas amenazas del ministro de Defensa del régimen israelí de atacar a Irán, así como de su jefe del Estado Mayor, quien reveló los planes de Israel para lanzar un ataque contra el programa nuclear iraní.
El ataque deliberado por parte del régimen israelí contrauna instalación nuclear salvaguardada y sumamente sensible, con un alto riesgo potencial de liberación de material radiactivo constituye un criminal e imprudente acto de terrorismo nuclear y supone otro claro ejemplo de su continua violación del derecho internacional. Teniendo en cuenta que la creciente y constante amenaza del terrorismo nuclear que plantea el régimen israelí pone en riesgo la paz y la seguridad internacionales, corresponde a la comunidad internacional condenar esos actos terroristas criminales en los términos más enérgicos posibles.
Además, las explícitas amenazas mencionadas contra un estado miembro de las Naciones Unidas constituyen una grave violación del derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas, en particular de su Artículo 2 y, por lo tanto, no deben ser toleradas por la comunidad internacional ni por el Consejo de Seguridad.
En menos de dos años, el régimen israelí ha llevado a cabo innumerables atentados aventureros, abiertos y encubiertos, como los actos terroristas contra los científicos y los centros nucleares iraníes, ataques contra buques comerciales en la región, así como ataques con aviones no tripulados y ataques aéreos contra ciertos países de la región, en clara violación de los principios cardinales del derecho internacional. Si no se establece uncontrol, esos continuos actos ilícitos y las medidas de provocación sistemáticas, con todas sus graves ramificaciones, indudablemente desestabilizarán aún más la región y pondrán en peligro la paz y la seguridad internacionales.
Tras el largo historial de las operaciones de sabotaje del régimen israelí contra nuestras actividades nucleares pacíficas y el cobarde asesinato de varios científicos nucleares iraníes y otros científicos en el pasado (A/65/622-S/2010/634, A/66/656-S/2012/27 y S/2020/1148), así como el ataque cibernético conjunto de Estados Unidos e Israel contra las instalaciones nucleares de Irán mediante el virus informático malicioso conocido como Stuxnet, el Consejo de Seguridad debe estar a la altura de sus responsabilidades de acuerdo con la Carta y tomar las medidas necesarias inmediatas para prevenir todas las políticas desestabilizadoras y las prácticas ilegales y a la vez aventureras del régimen israelí, y hacer que rinda cuentas de todos esos actos.
La República Islámica de Irán, decidida a ejercer suinalienable derecho a desarrollar la investigación, la producción y el uso de la energía nuclear con fines pacíficos en todos sus aspectos, advierte contra cualquier posible error de cálculo o acto aventurero del régimen israelí. Tal como indicamos en nuestras cartas anteriores al Consejo de Seguridad, Irán se reserva el derecho inherente en base al derecho internacional a tomar todas las medidas necesarias para proteger y defender a sus ciudadanos, sus intereses, sus instalaciones y su soberanía contra cualquier acto terrorista o perturbador.
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