La resolución insta a los signatarios del Tratado de No Proliferación (TNP) a acelerar sus esfuerzos en consonancia con el cumplimiento de los compromisos asumidos anteriormente sobre la destrucción de los arsenales de armas nucleares de acuerdo a los principios de transparencia, irreversibilidad y bajo supervisión internacional.
El 1er Comité de la AGNU, uno de los seis comités más importantes, se encarga de las cuestiones de desarme y seguridad internacional. Se reúne todos los años en octubre para un período de sesiones de 4 a 5 semanas, después del debate de la Asamblea General.
Según el TNP, los países nucleares se han comprometido a rechazar la fabricación de nuevas armas nucleares y la transferencia de esas armas a otras naciones.
La propuesta de Irán enfatiza que sería deseable que todos los estados miembros de las Naciones Unidas apoyen la creación de un Oriente Medio libre de armas nucleares, lo cual implicaría la adhesión del régimen sionista al TNP y permitiría la supervisión por parte de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).
La propuesta también señala que los estados que no disponen armas nucleares deben tener la seguridad de que las potencias nucleares jamás las utilizarán contra ellos.
El representante iraní advirtió asimismo que la nueva carrera de armamentos nucleares es muy preocupante, e instó a poner fin a la misma.
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