Según la Agencia de Noticias Yonhap, la ONU notificó la semana pasada a Irán que probablemente perdería su derecho al voto por los atrasos estimados en unos 18,4 millones de dólares, junto con otros siete estados miembros de la Organización, tal como se estipula en la Carta de las Naciones Unidas.
La deuda total que Corea del Sur mantiene actualmente con Irán por las sanciones de EEUU superaría los 7 mil millones de dólares, un importe retenido en dos entidades bancarias: el Banco Industrial de Corea (IBK) y el Woori Bank, explicó Yonhap, señalando que Teherán ha exigido la inmediata liberación de sus activos. Esa cuestión se ha convertido actualmente en un importante punto de fricción en las relaciones bilaterales.
Al parecer, ambas partes coinciden en utilizar esos activos para resolver el problema de las cuotas impagadas a la ONU, según informaron dos fuentes que solicitaron permanecer en el anonimato.
“En ese sentido, nuestro gobierno está en contacto con el gobierno iraní, EEUU y la ONU”, señaló una de esas fuentes.
Según la Agencia surcoreana, el Ministerio de Exteriores iraní confirmó que desea hallar "un canal seguro" para el rápido abono a la ONU de la cuota pendiente.
En 2021, la ONU vetó a Irán de su derecho al voto por el impago de sus cuotas. No obstante, EEUU autorizo que Teherán utilizara algunos de esos fondos retenidos en el IBK para el abono de una tarifa mínima y la restauración de su capacidad de voto, concluyó Yonhap.
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